¿Quién es el innombrable? Una reflexión sobre límites y atribuciones
Hoy planteo una serie de interrogantes sobre ciertas acciones que han despertado inquietudes respecto al cumplimiento de las funciones establecidas por ley. ¿Actúa este personaje correctamente, o simplemente desconoce los límites de su autoridad al tratar de asumir roles de otras instituciones?
Primero, ¿cómo es posible que faculte al personal de su institución para sustituir a la DIGESETT en la fiscalización vehicular? Esta labor está claramente asignada por la normativa vigente.
Segundo, ¿con qué fundamento intentó realizar un registro de ciudadanos extranjeros en el municipio?, una tarea que corresponde al Ministerio de Interior y Policía a través de la Dirección General de Migración.
Tercero, ¿qué justificación existe para el intento de imponer un cobro de placas a los motores?, contradiciendo las competencias establecidas por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
Cuarto, ¿por qué asumió el control de calles y avenidas?, sustituyendo funciones que pertenecen al INTRANT, entidad que norma la movilidad, el transporte terrestre, el tránsito y la seguridad vial
Y ahora, ¿por qué interviene en la supervisión de puentes?, una labor que claramente corresponde al Ministerio de Obras Públicas
A esto se suma el hecho de que este funcionario enfrenta al gobierno central con sus acciones, creando tensiones innecesarias y contradicciones entre las instituciones encargadas de velar por el orden y el cumplimiento de las leyes. Además, este funcionario debe ser llamado a capítulo, ya que se está constituyendo en un problema para el gobierno central con sus decisiones y actuaciones fuera de lugar.
Esto me lleva a preguntar. ¿cree este personaje estar por encima de la ley, o simplemente desconoce las delimitaciones de sus funciones? Las instituciones tienen roles específicos por mandato legal, y cualquier intento de abrogarlos genera incertidumbre y afecta la gobernabilidad.
Invito a reflexionar sobre el impacto de estas acciones y la necesidad de respetar el marco institucional que nos rige.
¿Ya sabes quien es el innombrable?
