Venezolanos en RD marcharán en apoyo para que Edmundo González tome la presidencia
Miembros de la Mancomunidad Dominico-Venezolana anunciaron que, con motivo de la llegada del opositor Edmundo González Urrutia a la República Dominicana este 9 de enero, se llevará a cabo una marcha pacífica frente al Palacio Nacional en apoyo a su aspiración de asumir la Presidencia de Venezuela el próximo 10 de enero.
La movilización se realiza en un ambiente de tensión, luego de que el gobierno de Nicolás Maduro ofreciera una recompensa de 100,000 dólares por la captura de González Urrutia.
“Edmundo González Urrutia está en estos momentos afinando detalles para viajar a Venezuela desde aquí. Mañana (martes) saldremos a las calles”, expresó José Adalberto Pérez, presidente de la Mancomunidad Dominico-Venezolana.
En paralelo, la líder opositora venezolana María Corina Machado confirmó ayer su participación en la manifestación del 9 de enero. Machado, quien ha permanecido en la clandestinidad, anunció que asistirá al evento un día antes de la toma de posesión presidencial, prevista para el 10 de enero, cuando tanto Nicolás Maduro como Edmundo González Urrutia se proclaman como presidentes de Venezuela.
A continuación el comunicado íntegro donde la Mancomunidad muestra su posición:
La República Venezolana con su modelo de gobierno está retrasada y atrapada en el tiempo actualmente; el socialismo democrático fue derrotado por el liderazgo de Edmundo González en las elecciones presidenciales del pasado mes de julio de 2024.
Los Estados del siglo 21 tienen su base fundamentada en su Carta Política, el respeto a los Derechos Fundamentales de las personas, siendo así los seres humanos el centro de los derechos; haciendo transversalidad con el cumplimiento de los Instrumentos Internacionales o Pactos en Derechos Humanos.
El Estado Venezolano, desde el gobierno, sigue generando violaciones constantes en materia de las Libertades Públicas. Esta nación tiene un retroceso de 100 años en su economía; a pesar de ser uno de los países más ricos del mundo, se ve a todas luces la pobreza, la indigencia, las migraciones, la débil seguridad ciudadana y la inestabilidad política. Este país tiene una veloz capacidad de endeudamiento externo de los más altos de América Latina; debe 161 mil millones de dólares.
Un reducido grupo élite, de un 3%, maneja todo el presupuesto anual de Venezuela, y son los que tienen Derechos Humanos y Privilegios en esa nación. Reiteramos que es frecuente ver en las redes sociales las numerosas actuaciones de sus autoridades atropellando a sus ciudadanos, siendo esto una vergüenza para la historia universal y, en especial, para el citado país.
La aspiración más elevada que anhelan los venezolanos es vivir y disfrutar de sus Derechos Humanos. Hace tiempo que a los líderes políticos del socialismo democrático o los oficialistas de Venezuela, se les cayó la máscara de tanto maquillarla, y detrás se vive una dictadura de partido de hierro.
El gobierno de Nicolás Maduro está compuesto por funcionarios que aman el dinero, la publicidad, la corrupción, el clientelismo político, el nepotismo, la discriminación, conjuntamente con la miseria e indigencia de esa sociedad. Con la llegada en los próximos días a la casa de gobierno de Miraflores del líder Edmundo González, este debe poner en práctica legislaciones y políticas públicas que repercutan en elevar la calidad de vida de sus ciudadanos.
La República Bolivariana es de aproximadamente 40 millones de personas, con 9 millones de desplazados a otros puntos del mundo. El presidente electo Edmundo González inspira esperanza y consenso en los venezolanos, quienes están repletos de sueños para superar la crisis económica y democrática en la que están sumergidos.
El Dr. Ricardo Campusano, presidente de la Organización por los Derechos Humanos- XDH, conjuntamente con la Mancomunidad Dominico-Venezolana, que preside José Alberto Pérez, condenan públicamente el gobierno que dirige Nicolás Maduro, ya que la ilegalidad no genera legalidad.
El actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, debe hacer una transición de mando pacífica el día 10 de enero de este año al nuevo presidente electo Edmundo González. De lo contrario, estarían dadas todas las condiciones para una explosión social en ese país suramericano, lo que podría generar una crisis de gobernabilidad. La voluntad popular expresada en las elecciones no puede ser desconocida en la República de Venezuela.
La transición de mando es el 10 de enero de este año, al nuevo presidente electo Edmundo González. Si el actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se opone a efectuar la referida transición, se convierte automáticamente en un gobierno de facto.
Entonces, estarían en el escenario político de la República Bolivariana todas las condiciones para una explosión social sin precedentes, acompañada esta de una guerra civil, ya que las estructuras militares están divididas. También, se daría lugar a un gobierno ilegal que no será reconocido por la comunidad internacional.
Nosotros, como entidad de Derechos Humanos, si Maduro quiere seguir en el poder luego de finalizar su mandato más allá del 10 de enero del año en curso, solicitamos que a Venezuela se envíen fuerzas de paz de la OEA o la ONU, ya que la voluntad popular expresada en las elecciones no puede ser desconocida por el actual presidente de Venezuela.
Los derechos humanos deben ser protegidos y garantizados, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión.